La esencia del fútbol amateur esta plagada de valores que engrandecen el deporte más lindo del mundo: la solidaridad, el sacrificio, la inclusión, el compromiso y el amor por los colores son algunos de ellos.

También lo es la honra y el recuerdo eterno a las personas que marcaron a fuego las instituciones barriales y que entraron en los lugares de memoria eterna de los clubes. Esto ocurrió en los encuentros en Villa Castells, en el inicio del Torneo Regional.

Everton salió con una bandera en homenaje a «Poroto» Gallardo, el jugador que convirtió el gol que le dio la clasificación a dicho certamen y horas después falleció en un accidente.

En el mismo encuentro, una bandera tiene estampada la frase: «La banda del Negro», en homenaje a Marcelo Fortes, presidente del club Decano, quien también nos dejó físicamente.

En esa misma cancha, el local desplegó orgullosamente una bandera con el rostro de Alfredo y Nino, este último fue presidente y actor principal del gran presente institucional y deportivo de su amado San Lorenzo de Villa Castells.


A unas cuadras de distancia, el «Tano» Burgos abrió el marcador para el Naranja frente a Malvinas y mostró emocionado una camiseta: «Marce tu alegría será eterna. Familia Naranja», en homenaje a Marcelo, el papá que llegó llevando a su hijo a jugar y que se convirtió en hincha fiel de ADIP, su lugar en el mundo.


Sabemos que los clubes muchas veces son noticias por algunos episodios de violencia, sin embargo, este fin de semana fluyó la esencia del fútbol amateur, estos gestos que se ven a diario, pero que a veces no se visibilizan y que desde nuestro medio los aplaudimos.

Por Alfredo Córdova

Periodista Deportivo recibido en la gloriosa Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la UNLP. Futuro docente. Creador de Cancheros. Casado con Belén Correa y padre de Martina, Walquiria e Isaías.