HISTORIAS DE VIDA, HISTORIAS DE LIGA
Ella es maestra jardinera, repostera, apasionada por la fotografía, mamá de Matute de 9 años y Tomás de 13, todo eso y más, es Gabriela Macchi, la mujer que todos los fines de semana está en el club Fomento de Los Hornos gatillando su cámara y capturando momentos irrepetibles, que hacen y harán felices a muchas personas.
«El club lo conocí desde siempre, ya que soy de Los Hornos y queda cerca de casa», comienza a relatar Gabi. «En el 2015 fue la primera vez que llegamos al club porque un amigo de Matu jugaba ahí». Ese primer contacto con el club, se convirtió, con el tiempo, en una pasión por los colores del Fome. Gabriela cambia la voz y cuenta que Matute fue a probarse en otros clubes pero finalmente: «En 2017 volvió y no se fue más y ahora defiende los colores de Fome».
¿ME SACAS UNA FOTO?
Gabriela ama la fotografía y como no podía ser de otra manera, comenzó a ir a la cancha con la cámara a sacarle fotos a su hijo. Sin embargo, una pregunta recurrente comenzó a rodearla: «¿Me sacas una foto?», le decían los nenes, compañeros de Matute y otros nenes de las distintas categorías. Inclusive los padres le pedían que inmortalice esos momentos de la vida de sus hijos.
«Me da placer ser la fotógrafa. Además de las horas que le dedico al club. Me ha pasado llegar a casa a las 17 o 18 horas y tomar una merienda rápida y ponerme a editar». Son 400 fotos aproximadamente las que Gabi saca en una jornada. También filma los partidos de la 2009 y edita los goles, atajadas y las mejores jugadas. No se le escapa nada.
«Me reconforta el alma ver los me gusta, los comentarios de los papás y que la fotos estén por todos lados», afirmó Machi, quien aseguró que todo lo que hace es para ver feliz a su hijo y a todos los chicos del club. Cabe destacar que Cintia, es otra mamá de un nene de la 2010, que también se sumó a sacar sacar fotos y ahora ambas son administradoras de una página de facebook, en la que suben resultados y todo el material fotográfico de cada fin de semana.
FOMENTO ES UNA FAMILIA
Gabriela junto con otros padres y colaboradores le dedican muchas horas de su fin de semana al club. «A veces sábado o a veces domingo tambien, si hay doble jornada. Vamos con todos los papás y ayudamos en todo lo que haga falta. Unos días antes de comenzar el torneo nos juntamos a dejar el club en condiciones. Jugadores, abuelos, padres y los propios nenes pintan los arcos, los bancos. Eso es mérito de todos», sostuvo Gabriela.
Antes de finalizar la nota, le preguntamos sobre los mejores momentos vividos en el club, a lo que ella respondió: «Me han dedicado goles, ese es el mejor regalo, me lo llevo bien guaradado en mi corazón. Tambien el haber conocido gente muy buena en el club. Fomento para mí es una familia».
Esta es parte de la vida de Gabriela Macchi, así como ella, hay miles de personajes anónimos que cada fin de semana hacen el mundo un poco mejor. Nuestros clubes de barrio están llenos de historias de vida, historias de Liga.